Recientemente, un estudio evaluó algunas de las estrategias que más comúnmente utilizan las personas para sentirse más felices, dando a conocer que métodos son los más efectivos.
En base a ese estudio, el 60% de nuestros sentimientos positivos, y el 70% de nuestros sentimientos negativos, se predicen por factores que son difíciles o imposibles de cambiar inmediatamente o a veces del todo: como nuestros genes, nuestra edad, y ciertos rasgos de nuestra personalidad. Puede sonar desmotivante, pero lo bueno es que el 40% de nuestros sentimientos positivos, y el 30% de nuestros sentimientos negativos si pueden ser influenciados por las decisiones que tomemos en este mismo instante.
Importante: lo que sea que sientas, está bien. Las emociones que calificamos como negativas son parte de la experiencia humana, y absolutamente necesarias para crecer; nunca te sientas mal por sentirte mal, date un respiro. Ahora, sigamos adelante.
- Decide ser más feliz. El primer paso para abrir la puerta a cualquier otra estrategia. Pon tu intención, mente, corazón y todo lo que tengas en ello.
- Haz algo concreto que te lleve a ese estado de ánimo que quieres. Encuentra lo que te haga sentir feliz, baila, escucha música, crea algo, haz yoga, corre, cocina, lo que sea que te conecte con la sensación de bienestar que buscas.
- SI estás en una situación difícil, cámbiala o acéptala. Y continúa con tu vida, no te quedes atrapado en pensar excesivamente en lo que está mal, en lo negativo. Recuerda que nuestra realidad se crea según los pensamientos que tenemos, y eso es lo que atraemos a nuestra vida.
- Vive más, pensa menos. No trates de forzarte a ver sólo lo positivo o a obviar los aspectos negativos de la vida, sino intenta aceptar la realidad como es y sigue con tu vida; trabaja, duerme, come, cuídate, interactúa con otros, sólo sigue.
- Intenta concretar cosas. Sólo pon un pie delante del otro. Siente que tienes logros, celebra las pequeñas victorias.
- Apunta a alcanzar tu máximo potencial. Visualiza cómo eres cuando haces y das lo mejor de ti.
- Organiza tu vida y tus metas. Sé consciente de la dirección en que quieres moverte y cómo quieres comenzar. No necesitas ver todo el proceso ni preocuparte de cómo superarás obstáculos hasta que estés al frente de ellos. Todo lo que necesitas es orientarte en esa dirección, y saber cuál será tu próximo paso para llegar allá. Un paso a la vez.
- Actúa feliz. Compórtate de acuerdo a cómo quieres sentirte, cambia tu lenguaje corporal; sonríe más. Piensa en un pequeño bebé jugando y riendo, o cualquier imagen que te haga sonreír. Por un momento, sé ese bebé.
- Enfócate en mantener las relaciones que son importantes para ti. Pon límites sanos, con respeto por ti y los demás.
- Persigue metas profesionales, o en algún proyecto personal. Muchos se sienten energizados por este desafío. De todas formas, si tu situación laboral es tóxica, quizás debas buscar otras oportunidades que estén alineadas con lo que quieres para ti.
- Interactúa con amigos y goza su compañía. Reír con amigos es la idea de felicidad de muchos.
- Ejercítate. Incluso unos pocos minutos de máximo esfuerzo son útiles si lo haces varias veces a la semana. Encuentra alguna práctica física que vaya contigo y hazla parte de tu rutina.
- Mantén tu salud física. Haz tiempo para preparar comida de verdad y no conformarte con alimentos procesados y snacks azucarados. Siéntate menos, muévete más.
- Acepta apoyo de tus cercanos. Apóyalos y anímalos tu también a ellos.
- Saborea el momento. La felicidad no es un destino lejano al que llegar. Es aquí y ahora. Agradecimiento por lo que ya tienes, puede resultar como el sol, iluminando hasta el más oscuro rincón.
- Ora o medita. La vida no es todo pensar y hacer. A veces es bueno estar quieto y experimentar la alegría de sólo ser. Vive cada respiración como un regalo.
- Busca contención en tus creencias. Cuando puedes encontrarle sentido a una situación difícil, puedes atravesar por casi cualquier cosa y seguir siendo feliz.
- Sal de fiesta! No necesita explicación! 😉
- Trabaja en tus hobbies. Encuentra algo lo suficientemente disfrutable y a la vez desafiante, para que permita desarrollar tus talentos e intereses.
- Vuélvete más activo en tu tiempo de ocio. Limita tu ocio pasivo. Una dosis sana de relajación está bien, pero excederte viendo televisión y dando vueltas en internet, de compras o de pereza, es más probable predecir infelicidad que felicidad.
No tienes que intentar todas estas cosas de una vez, elige una o dos estrategias que mejor vayan con tu vida. Comienza hoy y antes de que te des cuenta, estarás sintiéndote más feliz. Toma coraje de la ciencia, lo que ha andado bien para cientos de otros, probablemente te haga bien a ti también. No esperes a que la felicidad caiga del cielo, construye la tuya propia!
2 comentarios
Me gusta mucho sunyabienestar. De tenerlo cerca, ya lo habría hecho parte de mi vida. ☺
Gracias pir compartir-te.
Un abrazo.
Y feliz año 2018!
Gracias por compartir tu sabiduria!! Da gusto leerte y escucharte Francisca. Empezar meditación a tu lado es de las mejores cosas que he hecho este 2017 y deseando seguir aprendiendo!!
Un abrazo!
Jess